Cursos de Gestión de Estrés

Academia: Sentirme Mejor

Duración: A medida

Precio: Aprovecha FUNDAE

Formación en Gestión De Estrés
Cursos de gestión de estrés para todo tipo de empresas. Impartidos por especialistas en gestión de estrés, con experiencia como ejecutivos. Aumenta la tolerancia al estrés y reduce el distrés psicológico en equipos de trabajo. Haz del estrés un activo, y mejora el rendimiento. Reduce las bajas laborales y el “burnout”. Cursos adaptables a cualquier duración y formato.
Tipo de curso

Empresas

En directo

E-Learning

No

Fecha de inicio

Flexible

Técnicas de gestion de estrés, que utilizaremos en los cursos

Las claves de la gestión de estrés

El estrés es un mecanismo genérico del cual disponemos todos los mamíferos. Nuestros organismos disparan la respuesta de estrés cuando se ven enfrentados a cualquier tipo de amenaza. Malos hábitos, mal descanso o mala alimentación, crean estrés físico en nuestros organismos. La exigencia, la incertidumbre, las amenazas o miedos crean estrés emocional. Por último, en ausencia de estresores, creamos estrés psicológico en nuestras cabezas.

Al ser una única moneda, el estrés es acumulativo. Si asumimos un alto grado de exigencia, esta creará estrés. Si nuestros hábitos mentales y psicológicos no son buenos, sumamos más estrés que viene a acumularse, haciendo más probable caer en distrés. Si actuamos sobre los hábitos vitales y psicológicos, tendremos la posibilidad de cargar con mayores cargas objetivas, sin sufrir menoscabos en el rendimiento y la experiencia vital.

La clave principal para controlar el estrés, es traer mayor consciencia a todo el proceso. Tomar conciencia de las propias sensaciones del estrés, aprendiendo a localizar los primeros síntomas de ansiedad, antes de que se retroalimenten. Tomar conciencia de las propias emociones, de qué las dispara, y como nos influyen. Tomar conciencia de las propias dinámicas mentales y narrativas que alimentan el estrés.

Uno de los principales objetivos de nuestros cursos de gestión de estrés, en cualquier formato o duración será, a través de dinámicas y ejercicios, despertar un mayor grado de consciencia sobre el estrés en los participantes, a través de aprendizajes vivenciales. Descubriremos que nos conduce al estrés a nosotros mismos, y como nuestras actitudes, influyen en el estrés de los demás.

Nuestras emociones son las mayores creadoras de estrés. El miedo, o la rabia son las principales, pero también otras, como la frustración, tienen un papel. Ni estas emociones, ni el estrés van a desaparecer. Pero aprender a reconocerlas y gestionarlas hará una enorme diferencia.

Por otro lado, el aprender a potenciar emociones positivas, como el agradecimiento o la amabilidad tiene un efecto reductor del estrés. Desarrollar comportamientos y emociones de carácter prosocial, frena la hipersensibilidad de las amígdalas (centro de detección de amenazas, responsable de la respuesta de estrés emocional)

Gran parte de el estrés que sufrimos, lo provocamos nosotros mismos en nuestras cabezas. Los estresores, no están delante de nuestros ojos, la mayoría de las veces. Son nuestros pensamientos rumiativos y el diálogo interno, los que alimentan reacciones de estrés innecesarias.

La mayoría de las personas no son conscientes de la continua narrativa mental que nos acompaña todo el tiempo. El narrador mental puede volverse tremendamente autodestructivo, y tendemos a creer los pensamientos espontáneos. Aprenderemos a tomar conciencia de la narrativa mental, y poner distancia con la misma.

La comunicación eficaz, suele ser una de las primeras victimas de un entorno cargado de estrés. A su vez, una comunicación ineficiente, es un elemento con gran capacidad para generar estrés. Cuando los canales de comunicación están rotos, se alternan la comunicación agresiva y la comunicación pasiva.

La auténtica comunicación efectiva, es la comunicación asertiva, donde se respeta el punto de vista propio y también el de la contraparte. Practicaremos la comunicación consciente con ejercicios y dinámicas, y estudiaremos las bases de la comunicación no violenta.

Nuestro patrón de respiración, se retroalimenta con nuestro estado emocional. Los humanos modernos, tendemos a asumir por defecto patrones de respiración torácica, que potencian el estrés. Si aprendemos a respirar correctamente, introduciremos un factor calmante en el círculo de alimentación del estrés.

Aprenderemos técnicas de respiración relajantes, a ser utilizadas como recurso en momentos estresantes, o como ejercicios de práctica diaria. También podemos practicar técnicas de respiración excitantes, que ayudan a aumentar la tolerancia al estrés.

Dado que el estrés no va a desaparecer totalmente, ya que es una respuesta necesaria para todos los mamíferos, será de gran utilidad trabajar en un “mindset” potenciador sobre el mismo. Esto sería un sistema de creencias o una actitud positiva ante el mismo. Asociar el estrés con algo malo, es una de las maneras en las que este se retroalimenta.

Si conseguimos entender el estrés como una respuesta fisiológica, imprescindible (aunque peligrosa) y nos habituamos a sus sensaciones asociadas, aprendiendo a reconocerlas en una fase temprana, será más fácil aprovechar, o incluso disfrutar, respuestas de intensidad moderada. Evitando también caer en respuestas excesivas.

¿A quién va dirigido?

Curso específico para empresas. Adaptable tanto a grupos pequeños, con trabajos interdependientes, como a grupos numerosos y heterogéneos.

  • Trabajadores en entornos de oficina
  • Miembros de equipos de trabajo estables
  • Equipos sometidos a estrés y alta exigencia
  • Empleados con trabajos interdependientes

Metodología

A pesar de que recomendamos cursos de 8 sesiones semanales, nuestros temarios son flexibles y nos adaptamos a cualquier duración. Los cursos son efectivos tanto en formatos presenciales como online.

  • Se imparten tanto online como presencial
  • Cursos de caracter, participativo y vivencial
  • Contenido adaptable a situaciones particulares
  • Ejercicios de trabajo individual entre sesiones
  • Audios con ejercicios de relajación y respiración
  • Al inicio y final haremos test de estrés estandarizados
Taller Gratuito

Solicita un taller gratuíto

Solicita un taller gratuito de hasta 3 horas. Gestión de estres y habilidades de alto rendimiento, Mindfulness o técnicas de respiración

Formación Gratis

Aprovecha los fondos Fundae

¿Sabes que la formación le puede salir prácticamente gratis a tu empresa? Nuestros cursos son bonificables. Podemos gestinar la bonificación por ti.

Recurso 13

Hacía tiempo que quería organizar algo de de Mindfulness en la empresa, pero a la dirección se le hacía algo raro. Les convencí para hacer un taller gratuito y el estilo de Alex (el monitor) les terminó de despertar curiosidad. Ahora meditamos 10 minutos juntos todas las mañanas.

Úrsula – Jefa de Recursos Humanos

Recurso 14
Recurso 13

Esto antes era una olla a presión. No hablabamos las cosas y cada vez había más mal rollo y menos comprensión. Desde que algunos hemos empezado a estar más tranquilos y somos más conscientes de como nuestras actitudes influyen a los demás, estamos mucho mejor. El mindfulness hasido una gran ayuda.

Antonio – Administrativo

Recurso 14
Recurso 13

Siempre estoy buscando maneras de mejorar el rendimiento y bienestar de los equipos. No sabía si esto funcionaría o no, pero hicimos una prueba. Los datos demostraron que tanto las evaluaciones de rendimiento, como los test de bienestar psicológico mejoraron claramente.

Luis Ángel – Director de area

Recurso 14

Solicita más información

Preguntas frecuentes sobre cursos de gestión de estrés:

No es un secreto que el estrés es la gran pandemia de el siglo XXI. El exceso de estrés, no solo empeora la experiencia vital de quien la sufre, su rendimiento también se ve muy mermado. El estrés cuesta millones a las empresas en forma de bajas laborales y bajo rendimiento profesional.

Distintas encuestas apuntan a el trabajo, como el mayor creador de estrés en nuestra sociedad. Dado que el trabajo es la primera causa, y la empresa la mayor interesada en la salud emocional de sus trabajadores, va a siendo horade que los empleadores tomen un rol activo, en la gestión del estrés de sus empleados.

Todas las sesiones tendrán una temática concreta, que se desarrollará con explicaciones teóricas. Aun así, la teoría tendrá por si sola un efecto limitado. Más importante, será la participación de los alumnos en dinámicas y ejercicios, de donde se obtendrán aprendizajes, de carácter vivencial.

Además de las sesiones, el curso incluirá ejercicios a realizar entre sesiones, por parte de los alumnos. Se solicitará hacer reflexiones o poner atención a situaciones de la vida cotidiana, para discutirlas en clase. Se facilitarán audios para la realización de ejercicios de respiración, concentración o meditación. La auténtica efectividad, dependerá del nivel de seguimiento de los ejercicios por parte de los alumnos.

Recomendamos una duración de 8 semanas, con una sesión semanal en directo de unas 2 horas, y ejercicios a realizar por los alumnos entre sesiones. Este es el formato más respaldado por estudios científicos.

Dicho esto, podemos adaptar temarios de gestión de estrés, a cualquier disponibilidad de tiempo. Desde talleres de una hora, hasta formaciones de larga duración. Nos aseguraremos de que cada cual sea efectiva, dentro de sus posibilidades.

Esto depende varios factores. Uno sería la duración y profundidad del curso de gestión de estrés. Pero otro, si cabe más importante será el nivel de implicación de los alumnos. Para obtener auténticos resultados, los mismos deberán participar activamente en las dinámicas en las clases, y practicar diariamente los ejercicios propuestos.

Para una duración de 8 semanas y un grupo con un buen nivel de implicación, es razonable esperar una disminución de alrededor del 30% en los niveles de estrés. La medición de la evolución de tales niveles, se hará a través de test estandarizados, a realizar al inicio y final de la formación.

No. A pesar de ser un formato altamente participativo, un curso de gestión de estrés, no es un coaching de equipos (podrían combinarse, pero no son lo mismo) ni una consultoría. Los temas profesionales propios de la actividad, organizativos o disciplinarios, no serán discutidos en las sesiones.

Cada alumno, será invitado a compartir temas personales relacionados con su propia gestión del estrés. Pero los monitores serán muy cuidadosos, de no permitir que el curso se torne en una terapia grupal, ni un espacio donde compartir quejas y frustraciones sobre la empresa.